El término Navegación, no sólo se refiere al gesto de girar un timón o de mover alguna palanca, de tener una cierta habilidad para amarrar, ni tampoco a saber trazar un rumbo en una carta náutica. Pilotar una embarcación requiere, por supuesto, saber cómo se hacen esas cosas, pero también muchas otras, quizás menos habituales.
Puede ocurrir que, de repente, alguien se caiga al agua, que alguien tropiece y necesite de unos primeros auxilios, que se nos haga de noche durante la vuelta a puerto, que se reciba una llamada de auxilio por la radio, que precisemos hacerla, o quizás que debamos tener que afrontar la necesidad de utilizar cualquier tipo de equipo de emergencia de a bordo.
Sin duda alguna, un buen conocimiento de la embarcación, el equipo y un perfecto estado de todos los elementos es fundamental. Independientemente de ello, puede ocurrir que ya no nos acordemos bien de cómo era eso que había que hacer ante esa situación, o que olvidemos algún detalle importante. Necesariamente, gobernar una embarcación, no importa si durante un crucero, un simple paseo o de una jornada de pesca, requiere mantenerse al día y saber perfectamente cómo actuar ante cualquier situación habitual, extraordinaria o de emergencia. La lectura regular de libros temáticos especializados, como por ejemplo de primeros auxilios, el uso de la radio, la navegación nocturna, etc. o incluso, si hace ya mucho que nos sacamos el carnet de navegación, apuntarse a algún cursillo de reciclaje, en cualquier escuela náutica, probablemente sirva para estar mejor preparado, y quien sabe si para evitar más de un disgusto o situación desagradable.
Mantener todo el equipo de emergencia completo, actualizado, y en buen estado, no tan sólo es algo obligatorio, sino que se trata de una serie de requisitos y de elementos concretos, escrupulosamente estudiados, considerados como vitales y esenciales para preservar nuestra seguridad básica en el mar, ante cualquier circunstancia. Por poner algún ejemplo, son pocos los que le dan alguna importancia al hecho de conocer su posición o situación, llevar un compás, una campana o una bocina de niebla… pero tras ser sorprendidos por una súbita e impenetrable niebla de convección, en mitad de lo que parecía ser una clara mañana, a escasas millas del puerto, sin duda, basta para cambiar cualquier percepción. Es importante no sólo llevar siempre todo el equipo obligatorio, sino también de preocuparse en mantenerse actualizado ante cualquier novedad, normativa, o nuevo elemento que pueda salir al mercado, susceptible de mejorar la llana obligación.
Si tiene alguna duda en este sentido o si desea conocer si su equipo, su preparación o cualquier otra cuestión relacionada, se halla en óptimas condiciones, no dude en exponernos su caso concreto y, gustosa y gratuitamente, le daremos nuestra opinión.
También es importante mantenerse al día documentalmente. No dude en verificar si realmente dispone de la documentación necesaria y en regla, tanto acerca de su embarcación como por su actividad habitual, si el seguro es el adecuado, o si su permiso de navegación se adapta bien a sus necesidades, o, de ser el caso, las ventajas de proceder a cualquier tipo de modificación. Si lo precisa y así lo desea, podemos ocuparnos de orientarle y de solucionar cualquier cuestión de este tipo.
Si su afición es la pesca, verifique también que dispone igualmente de todos los permisos y documentación necesaria. Sorprendentemente, en la actualidad, poca gente parece conocer la obligatoriedad de disponer de tales acreditaciones exponiéndose a considerable sanciones y hasta al requisado de su costoso equipo de pesca. Si lo desea, podemos ocuparnos de orientarle acerca de todo lo relacionado con la obtención de permisos y acreditaciones que precise.