La electricidad es algo fundamental hoy en día. Prácticamente todo lo relacionado con el confort depende en gran medida de la electricidad. En cualquier barco se utilizan sistemas de corriente continua de 12, 24 o, últimamente, también de 36 voltios. Este tipo de corriente tiene muchas ventajas dado que se trata de naves diseñadas para evolucionar en un medio húmedo y acuoso. La instrumentación, algunos componentes del propulsor, la iluminación y muchos accesorios, funcionan bien con este tipo de electricidad. Como en toda instalación eléctrica, el único requisito es la estanqueidad.  

Generalmente, el sistema de baterías, basta para suministrar el consumo necesario que podamos precisar. Ante la expectativa de un mayor consumo, basta con instalar una batería adicional provista de los correspondientes controles, y asunto solucionado. Sin embargo, dado que la carga de las baterías generalmente se realizará mediante el alternador del motor, un aspecto que debemos verificar es la capacidad de carga de dicho elemento, pues no solo debe abastecer nuestra necesidad accesoria de corriente, sino también las necesidades del propio propulsor que lo impulsa, y, además, cargar las baterías en un tiempo razonable.  

Según la necesidad de corriente que precisemos junto al tipo de uso que le demos a la embarcación, la instalación de un cargador adicional de baterías, conectado a la red eléctrica del puerto mientras no se usa la embarcación, puede bastar, pero en ese caso debemos saber que nuestra embarcación ya no es autosuficiente por el mero hecho de llevar el motor en marcha, por lo que su uso efectivo ya no dependerá tanto de llevar una cantidad de combustible suficiente, sino de la reserva eléctrica existente en las baterías.

Una solución muy efectiva es la de calcular la necesidad eléctrica real y sustituir el actual alternador por otro de mayor rendimiento. Por relativamente poco dinero puede sustituir su actual alternador de 70 Amperios por otro de 100 ó 120 Amperios, a 12 ó 24 Voltios, existiendo incluso en la actualidad alternadores capaces de suministrar potencias de hasta 310 Amp a 12 Voltios, o 220 Amp a 24 Voltios. 

Otra solución a considerar también puede ser la instalación de unas placas solares fotovoltaicas ya que, en la mayoría de los casos, la navegación, y por tanto el mayor consumo, se realiza durante el día. 

Otra opción es la instalación de un generador independiente de corriente. Las ventajas de disponer de un generador adecuado a nuestras necesidades son enormes ya que nos permite disponer de un caudal de corriente complementario idéntico a si estuviéramos conectados a la red eléctrica del puerto. Sin depender del propulsor principal, y con total autosuficiencia, podemos cargar en cualquier lugar las baterías y cubrir nuestras necesidades habituales de electricidad, pero también nos puede permitir alimentar holgadamente dispositivos y aparatos impensables con la tensión eléctrica habitual de nuestra embarcación, como por ejemplo un aire acondicionado, calefacción, calentador de agua, neveras, congeladores, lavadoras, placas vitrocerámicas, horno, microondas, y cualquier aparato de uso doméstico habitual. 

Podemos calcular con precisión cuáles son sus necesidades reales de electricidad, y, en función del uso previsto de su embarcación, recomendarle una u otra opción o una combinación de ellas. Si lo desea, podemos ocuparnos de llevar a cabo todos los trabajos necesarios, o bien suministrarle todo el material necesario para que se lo haga Usted mismo. 

También podemos ocuparnos de combinaciones de servicio, es decir, conseguirle los recambios adecuados y proceder, por ejemplo, a una restauración completa de su cuadro de mandos, ya sea mediante un trabajo efectuado directamente por nosotros sobre la embarcación o bien mediante nuestro servicio de trabajo a distancia, es decir, mediante el envío por paquetería del cuadro de mandos dañado, y su posterior restitución, una vez reparado, a fin de que Usted o su personal de confianza proceda a su montaje.

Si su embarcación dispone actualmente de un circuito de corriente alterna distinto al empleado habitualmente en Europa, (por ejemplo de 120V a 60 HZ habitualmente empleado en USA) en la mayor parte de los casos puede ser posible efectuar una sencilla transformación a los 230V y 50Hz europeos, aprovechando la mayor parte de la instalación y aparatos originales instalados. Si ese fuera el caso, no deje de consultarnos.